Federer y Nadal en la final de Australia

El 2017 arrancó a lo grande. ¿Por qué?

Dos de las más grandes leyendas del Tenis han alcanzado la final del Abierto de Australia, primer Grand Slam del año. 

Roger Federer y Rafael Nadal 

Con 35 años, y tras siete meses de inactividad, Roger volvió a competir oficialmente en este torneo y encantó a todos con un juego renovado y recargado. Bien ofensivo y con múltiples broches de su exquisita volea. 

Rafa, por su parte, retorna a la definición de un grande tras más de dos años de incansable lucha por recuperar esas sensaciones que lo llevaron a convertirse en “El Matador”. 

Entre ambos se han adueñado de 31 títulos de Grand Slam (17 para Roger y 14 para Rafa) y se han visto las caras en 34 ocasiones. Rafa lidera la cuenta de enfrentamientos entre ambos con un contundente 23-11.

Roger, es para muchos, el mejor jugador de la historia del tenis y Rafa, su eterno y más poderoso enemigo. 

El suizo ha ganado 88 títulos profesionales a lo largo de su carrera y posee el record de mayor semanas como número uno del mundo con 302.

El mallorquín lleva ganados 69 títulos profesionales y es considerado el mejor jugador de la historia sobre polvo de ladrillo tras haberse consagrado en nueve ocasiones en Roland Garros.  

El tenis sonríe y se ilumina por volver a tener a estos dos grandes en la definición de otro grande. 

El resultado del partido será un detalle. Ellos siguen maravillándonos con sus inspiradoras historias. Su humildad, talento, compromiso y entrega. Ellos y el tenis merecían vivir otro momento así.